La historia de Hassmann S.A. comenzó en octubre de 1955, cuando, después de dos años de matrimonio, el austriaco Karl Hassmann y su esposa brasileña Elka decidieron regresar a Imigrante/RS, la ciudad natal de Elka, y junto con su hermano y dos amigos, fundaron una sociedad para abrir una pequeña empresa en el municipio. La empresa, bajo el nombre Hassmann Lagemann & Cia. Ltda., comenzó como un taller simple para el mantenimiento de equipos y la fabricación
de piezas de repuesto. Prosperó con la producción de equipos para la agricultura, con sembradoras manuales y carretillas, así como marcos, lo que despertó en Karl un sueño más grande, el de tener una fábrica que fabricara productos en serie.

Con el claro objetivo de producir un producto en serie, que cumpliera con los estándares internacionales y que fuera un bien necesario en el país, en 1960 la empresa comenzó su primera producción de tornillos, junto con la producción de tuercas hexagonales torneadas de acero. Poco tiempo después, la asociación con los otros tres socios se disolvió, dejando solo a Karl y Elka a la cabeza de la compañía.

A pesar de todas las adversidades enfrentadas en ese momento, la empresa comenzó, en 1962, la producción de elementos de fijación forjados en caliente. Con competencia y dedicación, al año siguiente comenzó el suministro de piezas para grandes industrias nacionales, como Randon.

Durante un año turbulento en el escenario político y un ciclo de expansión económica, Hassmann se mantuvo en crecimiento y la producción de elementos de fijación forjados en frío también se convirtió en parte de los procesos llevados a cabo por la empresa.

En 1971, ya que solo Karl y Elka Hassmann permanecían en la dirección como socios y el segmento de actividad estaba bien definido, la empresa comenzó a adoptar el nombre de Metalúrgica Hassmann S.A., un paso definitivo hacia la expansión en el segmento.

Con el negocio en aumento, en 1978 Hassmann se convierte en proveedor de piezas de la primera empresa automotriz en Brasil, Scania, un logro significativo para una empresa que ya se establecía como una referencia nacional en la categoría.

Ese año, la dirección de la Metalúrgica Hassmann se reinventó y abrazó a Carlos y Peter Hassmann, hijos de la pareja Elka y Karl Hassmann, como nuevos miembros para la gestión de la empresa con sus padres.

En 1996 la empresa recibe la certificación ISO 9001, con un conjunto de prácticas de gestión que atestiguan la competencia de la empresa en la Gestión de la Calidad.

Con el fin de ampliar su mercado operativo, en 1998 Hassmann realizó su primera exportación, que fue para un cliente en Bolivia. Los resultados fueron tan positivos que sólo tres años después, en 2001, se realizó la primera exportación a los Estados Unidos a WABCO.

En 2004 Hassmann recibió la certificación ISO/TS 16949, lo que le permitió suministrar piezas a fabricantes de automóviles en el sector automotriz.

En 2006, mientras el país experimentaba sorprendentes mejoras en sus indicadores económicos y sociales, Hassmann expandió su negocio al mercado europeo, empezando una colaboración con la empresa B&M Germany, de Alemania.

Ya en 2009, Hassmann realizó su primera exportación a John Deere, una empresa agrícola considerada el primer fabricante de equipos en los Estados Unidos. Además, recibió la certificación ISO 14001, que contemplaba el compromiso ambiental de la empresa.

Manteniendo la tradición familiar, Augusto y Letícia, hijos de Carlos y Peter, respectivamente, comienzan a seguir los pasos de sus padres y comienzan sus actividades en la empresa.

Con el mercado nacional en ebullición, Hassmann rompió su récord en inversiones aumentando su productividad, modernizando sus equipos y consolidándose entre los grandes productores de fijadores en Brasil.

A pesar de que el país enfrenta una gran crisis económica, Hassmann continuó logrando grandes cosas, como la adquisición de TECNOCOAT, ubicada en Caxias do Sul/RS y activa en el negocio de tratamiento de superficies metálicas.

Cumpliendo con los requisitos de la industria automotriz, Hassmann obtiene la certificación IATF 16949.

Ya reconocida como uno de los mayores fabricantes de fijadores en el país, Hassmann abre su primera sucursal en Estados Unidos, ubicada en Tampa, Florida, con el objetivo de apoyar las exportaciones.

El año 2020 estuvo marcado por cambios, comenzando con la inauguración del nuevo centro de distribución de Hassmann, un proyecto moderno de alta inversión, diseñado estratégicamente para la expansión del espacio físico, la optimización de la logística interna y la agilidad en la entrega de productos. Con 65 años de experiencia, también existe la oportunidad de consolidar aún más su posición en el mercado con un intercambio de nombres estratégico, donde la expresión "metalúrgica" ya no representaba la complejidad y grandiosidad de los sectores industriales en que actúa. Por lo tanto, se adopta comercialmente la razón social de Hassmann S.A., junto con la nueva identidad visual de la empresa, que abarca el rediseño de la marca y la creación de un nuevo símbolo, inspirado en la tradición, la calidad y el compromiso.